SOTO SÁEZ, FERNANDO LIBORIO
El 20 de julio de 1221 tres niños, Yago, Zoraida y Yehudah, contemplan sin pestañear la colocación de la primera piedra de la catedral de Burgos.
El acontecimiento ha congregado a las más egregias personalidades del reino de Castilla, rodeadas por el pueblo de una ciudad que ese día se sitúa a la cabeza de la construcción de las catedrales góticas de Europa.
Durante las siguientes décadas, el magno templo será protagonista de su propia historia y testigo de excepción del devenir de un reino dirigido por una astuta reina desde la sombra de un joven monarca.
Intrigas nobiliarias, pactos y traiciones se entremezclan con la sencilla existencia del vulgo, consiguiendo que sus vidas sean anónimas protagonistas de la historia.
Con la fábrica de la catedral de Burgos como escenario, de cuyo inicio se cumplen ahora 800 años, el autor nos traslada a una época llena de vida y color para sumergirnos en un relato en el que se entretejen historia y ficción y en el que comparecen personajes históricos de los reinos peninsulares, maestros llegados del vecino reino franco, almogávares, comerciantes, viajeros.